Las varices tronculares son dilataciones de los troncos principales del sistema venoso superficial o de sus ramas. Son claramente palpables y suelen producir molestias (picor, dolor, hinchazón, piernas cansadas…). Este tipo de varices pueden provocar complicaciones en forma de flebitis, sangrados o alteraciones cutáneas como atrofia de la piel y en algunos casos la ulceración. Desde Clínica Vasculine os contamos la importancia de eliminar las varices tronculares y tratarlas a tiempo.
La importancia de eliminar varices tronculares en las piernas
Las varices tronculares son un tipo de flebopatía. Nacen de los ejes principales de las venas superficiales y dependen de la vena safena interna o externa. Las causas de la aparición pueden ser muy diversas, la principal, un mal funcionamiento del sistema circulatorio del organismo.
Existen ciertos hábitos que influye mucho como por ejemplo llevar un estilo de vida sedentario, el tabaquismo, permanecer largos periodos de tiempo de pie o sentado. Un caso particular es el de las mujeres durante el embarazo. Durante este periodo pueden ir apareciendo principios de varices en el abdomen. En la gestación, la piel va dilatándose conforme el embrión crece y el sistema circulatorio ve aumentadas sus exigencias y sufre una mayor presión, lo que propicia la aparición de venas en el tronco.
Los síntomas de las varices tronculares son los mismos que los de las venas varicosas que se forman en las extremidades, entre ellas cabe destacar las siguientes:
- Cansancio y pesadez en las piernas.
- Dolor
- Calambres
- Hormigueos
- Sensación de calor, picor y escozor
Varices tronculares y reticulares, ¿en qué se diferencian?
Las varices reticulares son venas dilatas que se encuentran justo por debajo del espesor de la piel. Las varices en esta fase se detectan fácilmente y suelen ocasionar problemas estéticos. Se dibujan como venas de color verde y de forma plana que siguen trayectos erráticos y posteriormente pueden ir aumentando su relieve. En algunos casos pueden producir calambres, hinchazón y molestias. Son el primer síntoma de que las varices pueden ir agravándose si no se comienzan a tratar pronto, es decir, las varices reticulares pueden llegar a causar el desarrollo de varices troncales o bien ser una consecuencia de estas.
Las varices troncales son ocasionadas por la dilatación y disfunción de las venas principales o troncales del sistema venoso superficial de las piernas. Se manifiestan con la aparición de venas gruesas y dilatadas. Siguen trayectos erráticos y sinuosos generalmente en la cara interna de las piernas o bien por detrás de las rodillas. Este tipo de varices, a diferencia de las reticulares, sí que causan muchas molestias y pueden llegar a romperse, formar un coágulo o causar úlceras varicosas. Es recomendable que sí se sufren este tipo de varices se traten estas con la mayor brevedad posible debido a las complicaciones que hemos visto que pueden causar.
Cómo ponerle fin a las varices tronculares
En Clínica Vasculine contamos con varias técnicas para tratar las varices tronculares. En muchos casos es necesaria la combinación de varias técnicas para conseguir el mejor resultado posible. Las técnicas que utilizamos para combatir este tipo de venas son:
- Microespuma: es una de las técnicas más eficaces, sencillas e innovadoras para tratar las varices de grado medio. La escleroterapia con microespuma consiste en la infiltración de un agente esclerosante que se inyecta en la vena dañada mediante una pequeña aguja, provocando así su cicatrización. La variz comienza a reabsorberse provocando de esta manera una desaparición progresiva.
- Dispositivo de sellado con cianoacrilato: se trata de un novedoso sistema para el tratamiento de las varices tronculares que permite eliminar el reflujo de la vena safena de la forma menos agresiva posible.
